CONSTRUCCIONES BAMBÚ MÁS SOBRE ESTE LINDO MATERIAL.
Para saber más acerca de las construcciones con bambú iniciaremos por explicar primero que es el bambú es un miembro de la familia de las gramíneas, con más de 70 géneros y más de 1200 especies. LA GUADUA es un género del bambú; una gramínea gigante nativa y de amplia distribución en América y familiar directa de la caña y el maíz; pero con un secreto bien guardado por años; ya que a diferencia de la caña de azúcar o el maíz, la lignina de sus tejidos con los años se convierte en una estructura muy dura, supera en resistencia a la madera y es más flexible y es menos pesada; lo cual facilita su transporte. Al ser una hierba no necesita replantación, ya que brota naturalmente cada año
La guadua es una planta que está en América desde el cretáceo; puede considerarse como un dinosaurio sobreviviente, pues se piensa que existió en la misma era de los gigantes reptiles desaparecidos. Su uso es antiquísimo en América, pues investigadores ecuatorianos han reportado improntas de bambú en construcciones que se estiman tienen 9.500 años de antigüedad.
A nivel constructivo, diversas investigaciones han servido para comprobar que una varilla de hierro de 1 cm2 de sección -menos de 1/2- resiste a la tracción de 40 KN (Kilo Newtons); una guadua con una sección de 12 cm2 resiste 216 KN. Por ello se le denomina «acero vegetal».
(±) Investigación «La madera ecológica del siglo XXI. El bambú como recurso maderable sustentable.» Facultad de Arquitectura, Universidad Nacional de Asunción, Paraguay. Vanessa Caffiero Dávalos, 2005.
A nivel ambiental, LA GUADUA es una Planta leñosa considerada de mayor crecimiento en el mundo, absorbe agua y metales pesados a gran velocidad; razón por la cual, está entre las plantas que más captan CO2 ya que ella puede llegar a crecer de 10 a 20 cm diarios, proceso que ayuda a la purificación del medio ambiente. Igualmente aferra los suelos, que además fertiliza para que no se erosionen y se pierdan.
La planta ayuda al medio ambiente desde que se siembra. Cualquiera podría decir que un árbol cumple con la misma función; pero debo decirles que no es así. Ya que los arboles crecen a un ritmo más lento; no absorben en la misma proporción CO2. Una hectárea de bambú captura 40% más de CO2 en los primeros 3 años que una de Pinos o Eucaliptos en 10 ó 14 años
Así que la guadua le lleva ventaja la madera.
En síntesis, tener plantaciones de guadua es muy buena opción ya que adicional a lo que se ha mencionado anteriormente en 6 años aproximadamente ya hay con que construir y lo mejor el guadual sigue vivo. La guadua se poda, pero la planta no muere a diferencia de lo que pasa con un árbol; pues mínimo hay que esperar 20 años para tener madera y lamentablemente el árbol debe ser talado. Un punto más a favor de la GUADUA.
Pasto maravilloso, divina planta porque si lo pensamos bien, al usar esta gramínea en procesos constructivos estamos evitando la deforestación de los bosques.
Ella ayuda a controlar la evaporación de los ríos, alberga distinta fauna y flora, es promotora de la biodiversidad de nuestra región y regula la temperatura entre otras cosas.
Los productos de bambú no generan residuos: Se descompone rápidamente favoreciendo a la tierra como abono natural introduciéndolo dentro de la tierra en 90 días y aportando abono y regenerando energía. Es el más grande productor de biomasa, superado sólo por las algas marinas.
La productividad es de entre 1200 y 1350 cañas por hectárea. El proceso de lignificación tarda entre 4 y 6 años.
Pero pensando en ella nuevamente como material constructivo:
´´ La guadua aguanta mejor los terremotos que el ladrillo y el hormigón y el impacto ambiental es mucho menor´´
Antes la guadua se utilizaba para proyectos populares hoy es considerada un lujo. Se usa en construcciones elegantes, costosas y modernas. Lo importante es saber que es un material versátil, resistente y ecológico que puede ser usado tanto en construcciones sencillas como en grandes proyectos arquitectónicos.
La guadua es una especie vegetal del futuro en términos maderables y ambientales, especie que más se asemeja al concepto de sostenibilidad.
Su dureza es comparable con la del roble y su ductilidad con la del sauce, con la ventaja que un bosque de guadua se regenera en sólo 6 años sin necesidad de replantación, mientras que el roble toma entre 50 y 100 años para desarrollarse. Especialmente sus fibras exteriores la hacen muy resistente a fuerzas axiales.
La Arquitectura contemporánea busca cada vez con mayor insistencia responder a la moda y a la estética, dejando de un lado los conceptos más sutiles y lógicos para concebir un espacio ambiental. En general y específicamente en nuestro medio ignora temas como la asoleación, iluminación, ventilación y materiales.
En Zuarq. Arquitectos no buscamos solamente trabajar proyectos arquitectónicos con guadua. Buscamos reinterpretar las formas, los materiales y las técnicas de construcción tradicionales. Dar importancia al contexto local y a su cultura. Construir con y para el paisaje.
Buscamos ir de la Arquitectura Vernácula a la Arquitectura Bioclimática.
En 1973, con la crisis del petróleo se empieza a valorar la necesidad del ahorro energético
En 1980, surge el concepto de desarrollo sostenible basado en tres principios.
- El análisis del ciclo de vida de los materiales
- El desarrollo del uso de materias primas y energías renovables
- La reducción de las cantidades de materiales y energía utilizados en la extracción de recursos naturales, su explotación y la destrucción o el reciclaje de los residuos
Según Sophia y Stefan Behling en su libro Sol Power, La Evolución de La Arquitectura Sostenible, La construcción consume la mitad de la energía que los seres humanos utilizan, un 25% el transporte y el otro 25% la industria.
Los arquitectos debemos reflexionar y buscar nuevos sistemas constructivos prácticos, eficientes y sostenibles que no consuman tanta energía.
Bambú – guadua es sostenible porque es un material duradero, que necesita un escaso mantenimiento, que puede reutilizarse, reciclarse o recuperarse pero no por construir con guadua ya se es sostenible. Por ello en nuestras obras desde hace 20 años buscamos integrar diferentes criterios que nos permitan acercarnos cada día a desarrollar proyectos más respetuosos con el medio ambiente y aunque todavía no podemos decir que somos 100% ecológicos trabajamos cada día a nuestro ritmo y posibilidades para en algún momento ojala no muy lejano poder decir lo hemos logrado.
Nuestros proyectos arquitectónicos son construidos con tecnologías apropiadas y teniendo en cuenta los siguientes parámetros:
Adecuada planeación Urbana: localización con respecto al sol, topografía, vientos, clima, protección de la vegetación.
Trabajo con materiales naturales como la guadua, calceta de plátano, adobe, madera entre otros.
Reducción de gasto energético: usamos energías pasivas en el diseño de las construcciones, manejamos conceptos bioclimáticos, la guadua en su mayoría se trabaja manualmente, tratamos de no hacer traslados inoficiosos entre otras cosas.
Protegemos los recursos naturales: Nuestros diseños se adaptan a los terrenos sin necesidad de talar árboles, la vegetación hace parte fundamental dentro y fuera de las construcciones. Manejamos techos verde, es decir vegetación en algún porcentaje de las cubiertas como sustitución de la capa vegetal retirada para hacer los desarrollos constructivos y también para generar beneficios adicionales como confort al interior de las construcciones, oxigenación, aislamiento térmico y acústico entre otras cosas.
Sistemas de ventilación, refrigeración y calefacción con sistemas pasivos.
Recuperación y uso de aguas lluvias
Manejo eficiente de residuos: desarrollo de línea fractal. Con todo el material sobrante de las obras desarrollamos accesorios complementarios y decorativos como lámparas, muebles, apliques etc.
Manejo de tecnologías vernáculas: adobe, guadua, tapia, entre otros